Y yo aquí tengo que mantenerme a flote, o los dos nos hundimos, y yo ya te he dicho que sólo se me da bien bucear, pero para bucear hay que sumergirse y a ti no te gusta que te entre agua por los oídos.
No nos mantenemos a flote. Te agarras a mi y ya apenas me quedan fuerzas.
La verdad es que aguantaré. Porque esto solo es agua y sé que te da miedo.
Tu haces lo mismo conmigo y las noches.
Gracias por no dejar que me ahogue entre las sábanas. Gracias por dejar siempre la vida encendida.
(per tu)
No hay comentarios:
Publicar un comentario